Entrevista a Petros

El futbolista del Real Betis, Petros, ha concedido una entrevista  a Alfinaldelapalmera:

-Ha llegado a Europa, al Betis, ¿cómo lo vive?
-Es un desafío en mi vida. Han sucedido cosas importantes para que yo esté aquí. Soy feliz. El Betis es un club gigantesco y con una afición muy apasionada, similar a la del Corinthians aunque ésta corresponde a casi toda la población de España (30 millones) pero tienen un carácter semejante por calidez, entrega… Me ha llamado la atención, no me imaginaba que fuera así. Los 40.000 socios no son una presión, sino una motivación, un orgullo. Antiguamente era más fácil que los jugadores brasileños viniéramos a Europa pero ahora los salarios son parecidos. Hubo ofertas mejores para ir a otros equipos, pero suelo escoger lo que me dice mi corazón y aquí estoy, en el Betis.

-¿Por qué el Betis?
-Los brasileños que estuvieron aquí me hablaron bien: Denilson, Assunçao, Oliveira, Edu… Les llamé antes de venir y me contaron lo buena que era la ciudad y el club. Me decían que era una elección segura. Además, soy de la misma ciudad que Daniel Alves y me dijo lo mismo, que el Betis es un club muy popular, con una gran afición y que no tuviera miedo, que iba a triunfar aquí. Yo siempre escucho a mis amigos y supone un reto importante para mí. Tengo una gran responsabilidad ahora al intentar seguir el camino de estos compatriotas en el Betis. Mi área de actuación es parecida a la de Assunçao, pero tal vez no tire las faltas como él (ríe).

-¿Cuándo fue la primera vez que escuchó hablar del Betis?
-Hace muchos años, con el traspaso de Denilson, que era el mayor de Brasil hasta ese momento. Era un jugador de selección y seguimos sus pasos.

-¿Qué le han dicho ellos de los derbis?
-¡Que no se puede perder jamás! Es la principal recomendación que me han hecho. Aquí hay dos campeonatos, el general y otro con el Sevilla. Tenemos que quedar por delante en la liga y no podemos perder derbis. Ellos han tenido ventaja en los últimos años pero creo que eso cambiará ahora.

-¿En qué momento le llega este salto?
-En los tres últimos años he sido el jugador que más partidos disputó en Brasil pero estoy notando que la de España es una escuela diferente. Estoy escuchando mucho a Pepe (Mel) para aprender lo más rápido posible acerca de lo que quiere de mí, pero no es fácil. A pesar de que tenemos lenguas parecidas hay dificultades. Estoy dando clases para tener mayor fluidez, creo que pronto estaré preparado. También lo noto en los entrenamientos, porque en Brasil no había hecho ninguno como los que hemos trabajado aquí, en todos los aspectos. Me gusta que nuestra propuesta sea ser protagonista del juego y eso lo he encontrado aquí. Mire, un ejemplo. Neymar es el mejor jugador de Brasil en mucho tiempo. Llegó al equipo más importante del mundo, que ya estaba formado, listo para jugar, y le llevó un año para desenvolverse bien. Yo quiero hacer mi función mucho antes. Trabajaré para estar automatizado pronto y cumplir lo que Pepe me pide. Soy humilde y voy a escuchar y aprender. Soy como una esponja, lo absorbo todo. Ahora mismo, hablando con usted, estoy aprendiendo. Cojo lo que creo que puede servirme, lo proceso y lo automatizo. Cuando lo consigues, ya es algo natural.

-Mel le ha empleado en varias posiciones pero, ¿cuál es la de Petros?
-Donde más cómodo me siento, mi zona de confort, es por el centro, ya sea en posición defensiva o atacante. Tengo mucho movimiento en el campo. Soy de transición, toque y me voy, como dicen aquí. Estos días he entrenado en la banda y eso es una dificultad mayor para mí pero me adaptaré a lo que pida el entrenador. En Brasil era el mejor recuperador de la liga, con 5 ó 6 por partido. Robo y hago la transición rápida. Pepe nos pide presión alta y eso encaja conmigo, no podemos darle espacios a los adversarios.

-¿Y qué Betis es el que están armando?
-Va a ser un año muy bueno. El equipo es trabajador, tiene ganas e ilusión, vonluntad de crecimiento, ambición. Características fundamentales para vencedores. Tenemos que ir escalón a escalón pero creo que acabaremos felices. En la plantilla tenemos una mezcla acertada. Juntos podemos se run equipo fuerte: la experiencia de un jugador consagrado como Van der Vaart, la juventud de Pezzella, la fuerza de Digard, la velocidad de Tarek… Un jugador difícilmente ganará partidos a no ser que sea uno de los grandes. Esto es un trabajo de todos. El club es más importante que cualquiera de nosotros y por él tenemos que luchar.

-¿Hay fijación con el primer partido?
-Si comenzamos bien se dirá que hemos hecho un buen trabajo de pretemporada, será el refrendo. Queremos certezas, victorias. En nuestro campo tenemos que ganar, hacer valer nuestra fuerza. En el fútbol los exámenes son por jornadas y hay que responder pronto.

-Le escucho con atención y no habla usted igual que la mayoría de los futbolistas.
-En Brasil decían que debía dejar el fútbol y pasar a ser comentarista o narrador (ríe). Allí hay pocos jugadores con estudios, no es habitual.

-No se le ve utilizando tópicos.
-No soy así y jamás responderé por responder. No diré lo típico de ‘tenemos que ganar’, ‘el partido es muy importante’, ‘los tres puntos son fundamentales’…

-¿Qué ha estudiado?
-Administración y dirección de empresas, pero no he conseguido acabar la carrera. Espero hacerlo pronto. Tengo muchos negocios en Brasil. Me apasiona comprar, vender inmuebles. Me llama la atención. Es algo que me servirá cuando acabe mi carrera. Yo soy de una ciudad del interior de Bahía, una región parecida en el clima a Sevilla pero algo más húmedo. Mi familia tiene muchos principios y me da un sustento de serenidad en cualquier orden de mi vida. Yo estoy para defender el nombre y la posición de mi familia, con humildad y haciendo las cosas correctas. El ramo inmobiliario en Brasil es muy fuerte y se está facturando mucho ahí. No sé qué haré cuando deje el fútbol porque aún queda mucho. Antes pensaba que podía ser entrenador pero mejor otra cosa.

-Dicen que a usted le encantan las matemáticas…
-Al trabajar con ventas y compras tenemos que dominarlas pero sirven mucho para la vida. Si no eres bueno en matemáticas te pueden pasar por encima.

-¿Le sirve también para analizar el fútbol?
-Sí, sí. En Brasil, en los partidos oficiales, pedía el vídeo y lo veía de nuevo para estudiar qué debo mejorar. Intento ser perfeccionista al cien por cien. No admito errar un pase o fallar en cosas simples. Hago mi propio scout: pases, robos de balón, acciones en el campo propio, llegadas al área… Todo eso me ayuda a mi crecimiento. Tengo que invertir en mí. Yo soy mi mejor inversión. Mi cuerpo y mi mente son mis herramientas de trabajo.

-¿Qué significan los tatuajes que lleva?
-Tengo diez y suponen puntos fundamentales en mi vida: mi madre, mi padre, mi hermano… Y soy muy católico. Me encanta por eso Sevilla, que es una ciudad muy religiosa. Dios es fuente de vida, de inspiración. Quien tiene a Dios lo tiene todo, puedes conseguir lo que quieras. Tengo tatuado la Señora, a Cristo, un crucifijo… Y la postal preferida de mi ciudad, Juazeiro. Mire, se parece mucho al puente de Triana, al lado del mercado y la calle Betis. El de mi ciudad es mayor, tiene dos o tres kilómetros, pero la arquitectura es parecida. En mi piel muestro lo que es importante en mi vida. No es exhibicionismo, eso no me gusta.

-Dice Macià que usted sorprenderá en la Liga.
-Es una persona muy sensata y uno de los motivos por los que he elegido el Betis. Tiene un gran conocimiento del fútbol y es respetado en Italia, España, Inglaterra, Brasil… Es un gigante en la gerencia del fútbol.

-¿Tiene espejos en el fútbol?
-Hace unos años era indiscutible el nivel del fútbol brasileño: Ronaldo, Rivaldo, Ronaldinho, Djalminha, Kaká… Todos jugaron en España, eran fuentes de inspiración para cualquiera. Hoy el fútbol de mi país está en decadencia por su mentalidad. Hasta que no la cambie no volverá a crecer. Brasil es un país muy acomodado. Los brasileños siempre dicen que son los mejores pero no hay que hacer eso, sino demostrarlo. Hay que trabajar para mejorar. Los brasileños tienen un pésimo hábito de presumir de lo buenos que son y disfrutar de ello, pero lo que hay que hace es trabajar. Si no mejoras en la vida, si no estudias, si no te preparas, te quedas atrás. Pasa en todo: en el trabajo, en casa, cuando eres padre… Y en el fútbol.

-¿Se aplica usted mismo esa filosofía?
-Claro. Es una ambición de vida. Nosotros vivimos para ser vencedores. Y quiero ver ese espíritu en el Betis.